lunes, 24 de noviembre de 2008

Valentino Rossi: El Campeón de MotoGP explica las claves de su éxito en 2008

El Campeón del Mundo de MotoGP de 2008 relata en esta entrevista cómo las decepciones de los últimos dos años y los cambios realizados en 2008 le impulsaron a recuperar el trono de la categoría reina.

Valentino Rossi and Casey Stoner on the podium at Motegi

Ha necesitado dos años de duro trabajo, pero Valentino Rossi ha podido recuperar finalmente en la temporada 2008 el título que perdió en 2006. En esta entrevista en profundidad, la estrella italiana analiza el trabajo desplegado con Yamaha para contrarrestar la amenaza de Stoner y Ducati y explica cómo aprendió a perder... y a luchar para ganar de nuevo.

`Al principio las cosas fueron bastante difíciles, especialmente recordando estos dos años en los que he aprendido a perder, lo cual es importante porque todo el mundo termina por perder un día u otro. El estilo y el carácter que muestras cuando pierdes es importante si quieres intentar ganar de nuevo´, reflexiona Rossi sobre su más reciente campaña en el Campeonato del Mundo.

`Hay varios puntos clave en mi éxito de 2008. La preparación física y mental era muy importante, traté de solucionar uno a uno los problemas que había tenido, con el fin de llegar bien preparado a la primera carrera, y concentrados en nuestros objetivos´ añade el piloto, recordando los preparativos de una temporada en la que necesitaba pasar página del frustrante final de campaña 2007 y en la que afrontaba el reto de cambiar de neumáticos.

`Trabajamos intensamente durante el invierno ya que cambiar de neumáticos no es algo sencillo´, relata el Campeón del Mundo de MotoGP.

`Me di cuenta enseguida de que los neumáticos Bridgestone tenían un gran potencial. En cualquier caso, necesitaba ese cambio, había tenido problemas con los Michelin, problemas pequeños, pero el hecho de cambiar me dio una motivación adicional, y además había que estar más concentrado para asimilar los cambios. Al principio las cosas eran bastante diferentes porque hubo que revisar la configuración de la moto y tuve que adaptar mi estilo de pilotaje´.

`Fue una cosa difícil, ya que desde fuera la gente puede criticar fácilmente y decir que me había equivocado. Pero yo estaba convencido de que cambiar de neumáticos era una buena decisión, porque aunque hubiera problemas con la moto, el potencial de los neumáticos era fantástico´, añade el piloto de 29 años.

El `Doctor´ también ha encontrado un mejor entendimiento con su moto, a pesar de tener que hacer cambios radicales para adaptarse a sus nuevos compuestos. El paso adelante conseguido por los técnicos de Yamaha es otra de las claves que subraya el ahora seis veces Campeón del Mundo de MotoGP para explicar su mejora personal.

`El año pasado nuestra moto era muy lenta, no era sólo una cuestión de neumáticos. Pero pude constatar una gran mejora y los grandes esfuerzos por parte de Yamaha para mejorar la M1. Notaba en cada test que los japoneses estaban trabajando realmente duro y que yo también debía hacerlo mejor´ explica Rossi.

Pero, más allá de las cuestiones técnicas, el motociclista de Tavullia era muy consciente de que los obstáculos más duros para recuperar la corona de MotoGP tenían nombre y apellido, y con todos ellos volverá a encontrase en 2009.

`Sabía que habría que temer a Stoner, por lo fuerte que se había mostrado en 2007. Y por otro lado siempre me ha gustado Pedrosa, porque pilota muy bien y me esperaba que estuviese en forma. También estaba Lorenzo, que llegaba después de conseguir dos títulos en 250cc y que empezó muy fuerte, sabía que tenía mucho talento, al igual que Dovizioso. Andrea es muy bueno y ha hecho buenos resultados con una máquina un poco más lenta que las oficiales, sé que en el futuro será un difícil rival a batir´.

`He ganado muchos títulos en mi carrera y puedo decir que soy afortunado, pero cada Campeonato es diferente, y en éste he invertido muchos esfuerzos, dentro y fuera de la pista´ afirma el piloto de Yamaha en otra de sus conclusiones sobre el curso 2008 que ha supuesto su retorno a la cúspide de la categoría reina.